REPORTE
DE LA AGENCIA DE NOTICIAS KALI-YUGA (19/09/15)
LA ‘GUERRA’
ENTRE RUSIA Y LOS EEUU
¿Podrá contarse con su colaboración contra el Isis?
La desinformación mediática
fomentada principalmente por las grandes potencias modernas que se disputan la
hegemonía del planeta ha creado la falsa idea de que, en tanto el conflicto
entre éstas es lo esencial y excluyente, todas los demás protagonistas que hoy
participan en lo que hemos dado en llamar como guerra de civilizaciones serían
en última instancia agentes funcionales a las mismas. Esta verdadera quimera ha
quedado una vez más contrastada por el inminente llamado a reunión entre Rusia
y EEUU, con la participación también de Inglaterra y por lo tanto el resto de
Europa, para tratar de coordinar las acciones a llevar a cabo en Siria en
contra del enemigo principal abiertamente denunciado como tal por todos en
unanimidad absoluta: el fundamentalismo islámico. Lo que acontece actualmente
es que si bien el objetivo estratégico, en especial la derrota del Isis, es el
mismo para todos varían las tácticas a emplear. Rusia considera que, en razón
de las peculiaridades que presenta el mundo islámico, sólo una dictadura férrea
de carácter laico y secular como la de Assad, con todas sus limitaciones, puede
garantizar que Siria no se desbarranque hacia el Islam antimoderno, del mismo
modo que hoy sucede en vastos territorios del Asia y del África y aun en la
misma Rusia en la región caucásica ocupada. Se recuerda al respecto la mala
experiencia acontecida en Libia en donde, al haber ayudado a sacarlo a Gaddafi,
la consecuencia no fue un régimen moderno y democrático, sino un peligrosísimo
resurgir del mundo islámico en tal región poniendo de este modo en peligro a la
totalidad del África del Norte y el Magreb. EEUU en cambio considera que, aun aceptando
las críticas antes apuntadas, también tal táctica está destinada al fracaso y
pone como prueba el hecho irrebatible de que Assad, luego de 4 años de guerra
civil, pasando por la desintegración de Siria y el genocidio de una gran parte
de su población, hoy se encuentra prácticamente en estado vegetativo pudiendo
subsistir solamente con los aportes de Irán, Hezbollah y las armas rusas, lo
que aun así no ha podido evitar que se encuentre acorralado en la región
costera del país controlando apenas un 20% del territorio.
A diferencia de la táctica rusa,
EEUU sigue apostando por los sectores rebeldes pues considera por el contrario
que una dictadura sangrienta es el mejor caldo de cultivo para el
fundamentalismo y este hecho mismo que acabamos de reseñar, el relativo al
debilitamiento incesante de Assad sería la mejor prueba de que tiene razón. Sin
embargo debe acotarse que los EEUU
acaban de efectuar un importante cambio respecto de su estrategia anterior. Han
comprobado que los grupos rebeldes democráticos nucleados en el Ejército Libre
Sirio han resultado tan ineficaces como Assad en su intento de conducir hacia
la modernidad a la revolución siria. Esto ha podido comprobarse en el reciente
informe del jefe del Estado mayor del Pentágono, Gral. Austin, ante el
parlamento norteamericano en donde manifestó, ante la sorpresa de todos los
allí presentes, que los rebeldes democráticos ‘son apenas 4 o 5’. Es decir, dicho de una manera más sencilla, aun más que
la apuesta rusa por Assad ha fracasado totalmente la táctica inicial de los
norteamericanos.
Por lo tanto esta especial reunión entre Lavrov y
Kerry como protagonistas principales tendrá esta vez un condimento nuevo y
novedoso. Los dos grandes derrotados de
la guerra explorarán perspectivas nuevas de acción. Y aquí debemos
prestar atención especial a lo manifestado por un especialista en cuestiones de
guerra contra el fundamentalismo islámico en el medio Oriente como el Gral. Petraeus.
Recordemos que a éste se le debe el éxito norteamericano en la guerra en contra
del Al Qaeda en Irak a la que pudo derrotar en 2006, aunque no totalmente como
él creyera en un primer momento, acudiendo a aliados autóctonos y sunitas, como
el movimiento de los Despertados iraquíes. Es decir, tratando de aprovechar las
diferencias existentes entre los sunitas y subvencionando ampliamente a los
moderados en contra de los radicales
sería posible un éxito en contra del fundamentalismo. Ahora Petraeus ha
prestado atención especial a la disidencia que existe entre Al Qaeda y el
Estado Islámico y ha considerado la posibilidad de que los EEUU respalde al
primero en su conflicto con el segundo que es el más radical de todos. Es decir
una táctica parecida a la empleada en Irak con el movimiento Despertado. Y al
respecto Petraeus ha reputado como altamente positivo el reciente mensaje
propalado por el líder de Al Qaeda Al Zawahiri, el que estuvo dedicado casi en
exclusividad a atacar al Estado Islámico por sus procedimientos totalitarios y
compulsivos manifestando que no es por la fuerza que debe establecerse un
califa sino a través del consentimiento entre los principales referentes del
Islam fundamentalista. Reparó Petraeus que fue tanta la atención prestada a tal
hecho que a pesar de que el mensaje fue propalado en cercanías del 9/11, ni
siquiera se habló de tal acontecimiento. A su vez considera también que este
antagonismo puede ser también explotado por los rusos ya que en la zona del
Cáucaso es cada vez mayor la deserción que se está produciendo hacia el Isis
desde las filas del Emirato que jurara fidelidad a Al Qaeda.
No sabemos si la nueva estrategia
Kerry-Petraeus podrá imponerse y convencerlo a Lavrov respecto de un respaldo a
la misma, pero de lo que sí estamos seguros es de que se está cometiendo un
error de grandes proporciones determinado en última instancia por la
resignación que hoy tienen las fuerzas modernas en rehuir todo protagonismo
efectivo en la guerra enviando fuerzas al mismo campo de batalla. Si el
Movimiento Despertado pudo conciliar con los norteamericanos para hacer frente
a Al Qaeda fue porque no compartía con esta organización los mismos principios.
Esto en cambio no sucede ahora, en donde la disputa es en el marco de un liderazgo
respecto de una misma concepción del mundo. Zawahiri y Bagdadi competirán entre
sí para mostrar cada uno por su lado cuál de los dos es más eficaz. Si un movimiento
fundamentalista basado en un acuerdo previo entre distintos líderes de una línea afín o por el contrario a través de la
unívoca adhesión previa a un liderazgo como en el último caso. Ambos pues
tratarán de mostrar cuál de los dos es capaz de golpear mejor al mundo moderno.
Para decirlo en un lenguaje comprensible para tales gobernantes. La competencia
entre las empresas Ford y Chevrolet no ha significado la destrucción de la
industria automotriz, sino lo contrario su cada vez mayor perfeccionamiento.
Por lo tanto el conflicto entre Al Qaeda y el Isis no beneficia ni a EEUU ni a
Rusia.
WALTER PREZIOSI
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