Ocho miembros del personal de seguridad afgano muertos en ataque de los talibanes
Los soldados murieron cuando un atacante suicida golpeó la base con un Humvee cargado de explosivos.
El asalto antes del amanecer del sábado tuvo lugar en la inquieta provincia de Nangarhar [Omar Sobhani / Reuters]
30 de enero de 2021
Un atacante suicida condujo un vehículo cargado de explosivos contra una base de las fuerzas de defensa afganas en el este del país, matando al menos a ocho miembros del personal de seguridad en un ataque reivindicado por los talibanes.
El asalto antes del amanecer del sábado tuvo lugar en la inquieta provincia de Nangarhar, donde los talibanes han denunciado varios ataques mortales contra las fuerzas gubernamentales.
Se produjo dos días después de que el Pentágono dijera que los talibanes no estaban cumpliendo las promesas hechas en un acuerdo firmado con Washington el año pasado, incluida la reducción de la violencia y la ruptura de los lazos con al-Qaeda.
Los ocho murieron cuando el atacante golpeó la base con un Humvee, dijo la oficina del gobernador de Nangarhar en un comunicado.
El subdirector del consejo provincial de Nangarhar, Ajmal Omar, confirmó el ataque pero calculó el número de soldados muertos en 15 y cinco heridos.
El portavoz talibán Zabihullah Mujahid dijo que su grupo llevó a cabo el ataque.
La oficina del gobernador dijo que las fuerzas de seguridad incautaron otro vehículo cargado con explosivos cerca de la ciudad de Jalalabad, capital de Nangarhar.
La provincia de Nangarhar ha sido testigo de varios ataques mortales llevados a cabo recientemente por el grupo armado ISIL (ISIS).
Por separado, dos bombas al borde de la carretera explotaron en Kabul el sábado, pero no hubo víctimas, dijo la policía.
La violencia ha aumentado en todo Afganistán incluso cuando los talibanes y el gobierno entablan conversaciones de paz que comenzaron en septiembre. Hasta ahora, las discusiones no han logrado ningún avance.
La nueva administración de Biden en Estados Unidos ha acusado a los talibanes de no reducir la violencia a pesar de haber firmado un acuerdo con Washington el año pasado para hacerlo.
Ese acuerdo requería que los talibanes detuvieran los ataques contra las fuerzas estadounidenses, redujeran drásticamente la violencia y avanzaran las conversaciones de paz con el gobierno en Kabul.
A cambio, Estados Unidos reduciría constantemente sus tropas en el país y eliminaría todas las fuerzas para mayo de 2021.
Pero el jueves, el Pentágono dijo: "Los talibanes no están cumpliendo sus compromisos de reducir la violencia y renunciar a sus vínculos con Al-Qaeda".
La administración Biden ahora está revisando el acuerdo, que el anterior gobierno de Trump firmó con el grupo armado en la capital de Qatar en febrero de 2020.
30 de enero de 2021
Un atacante suicida condujo un vehículo cargado de explosivos contra una base de las fuerzas de defensa afganas en el este del país, matando al menos a ocho miembros del personal de seguridad en un ataque reivindicado por los talibanes.
El asalto antes del amanecer del sábado tuvo lugar en la inquieta provincia de Nangarhar, donde los talibanes han denunciado varios ataques mortales contra las fuerzas gubernamentales.
Se produjo dos días después de que el Pentágono dijera que los talibanes no estaban cumpliendo las promesas hechas en un acuerdo firmado con Washington el año pasado, incluida la reducción de la violencia y la ruptura de los lazos con al-Qaeda.
Los ocho murieron cuando el atacante golpeó la base con un Humvee, dijo la oficina del gobernador de Nangarhar en un comunicado.
El subdirector del consejo provincial de Nangarhar, Ajmal Omar, confirmó el ataque pero calculó el número de soldados muertos en 15 y cinco heridos.
El portavoz talibán Zabihullah Mujahid dijo que su grupo llevó a cabo el ataque.
La oficina del gobernador dijo que las fuerzas de seguridad incautaron otro vehículo cargado con explosivos cerca de la ciudad de Jalalabad, capital de Nangarhar.
La provincia de Nangarhar ha sido testigo de varios ataques mortales llevados a cabo recientemente por el grupo armado ISIL (ISIS).
Por separado, dos bombas al borde de la carretera explotaron en Kabul el sábado, pero no hubo víctimas, dijo la policía.
La violencia ha aumentado en todo Afganistán incluso cuando los talibanes y el gobierno entablan conversaciones de paz que comenzaron en septiembre. Hasta ahora, las discusiones no han logrado ningún avance.
La nueva administración de Biden en Estados Unidos ha acusado a los talibanes de no reducir la violencia a pesar de haber firmado un acuerdo con Washington el año pasado para hacerlo.
Ese acuerdo requería que los talibanes detuvieran los ataques contra las fuerzas estadounidenses, redujeran drásticamente la violencia y avanzaran las conversaciones de paz con el gobierno en Kabul.
A cambio, Estados Unidos reduciría constantemente sus tropas en el país y eliminaría todas las fuerzas para mayo de 2021.
Pero el jueves, el Pentágono dijo: "Los talibanes no están cumpliendo sus compromisos de reducir la violencia y renunciar a sus vínculos con Al-Qaeda".
La administración Biden ahora está revisando el acuerdo, que el anterior gobierno de Trump firmó con el grupo armado en la capital de Qatar en febrero de 2020.
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