REPORTE DE LA AGENCIA DE NOTICIAS KALI-YUGA (SEGUNDA QUINCENA OCTUBRE DE 2010)

RUSIA SE COMPROMETE EN LA GUERRA EN CONTRA DEL FUNDAMENTALISMO ISLÁMICO


Los hechos no hacen más que confirmar lo que esta Agencia informativa viene manifestando desde hace 4 años de existencia.
El primero de ellos es la muy significativa noticia de que el fundamentalismo islámico está ganando la guerra en todos los frentes en donde combate contra las fuerzas de la modernidad.
El segundo está vinculado con el primero y es el abierto compromiso de Rusia en esta guerra y su estrecha alianza con los EEUU para concluirla. Este segundo hecho significativo se ha manifestado ya abiertamente en el día de ayer cuando una fuerza conjunta ruso norteamericana intervino en la provincia afgana de Nangahar ‘para combatir al narcotráfico’ según las usuales expresiones para consumo de giles.
Este hecho novedoso ha generado hasta la misma protesta del presidente afgano Karzai quien no puede hacer silencio ante la circunstancia de que esta intervención en su territorio por parte de la fuerza rusa acontece luego de que ésta fuera expulsada de su país en 1989. A todo ello habría que agregar también que es la primera vez que se produce un operativo conjunto ruso-norteamericano desde la pasada guerra mundial.
En realidad este acontecimiento no debería sorprender en manera alguna pues tiene algunos antecedentes. El principal de ellos es que el régimen ruso había ya autorizado a las fuerzas de la Otan que combaten en Afganistán a transportar sus pertrechos por sus territorios ante la imposibilidad de hacerlo por la frontera pakistaní. Sin embargo ha habido ciertos acontecimientos que han llevado las decisiones hacia un terreno de la abierta confrontación. El problema principal de Rusia es actualmente la guerra civil interna que tiene contra las fuerzas del fundamentalismo islámico en la región del Cáucaso norte que abarca las repúblicas confederadas de Chechenia, Dagestán, Ingushetia, Balkaria y Osetia del Norte. En tal región opera en forma victoriosa, siendo incluso reconocido hasta por integrantes del gobierno ruso, el Emirato del Cáucaso dirigido por Dokha Umarov. El mismo, a diferencia de lo que aconteciera en las anteriores guerras de Chechenia en la década del 90, es prioritariamente religioso y en segundo término nacionalista y por tal causa ha logrado introducir el arma de combate que ha permitido quebrar todas las ofensivas occidentales sea en Irak, como en Afganistán, Somalia y Pakistán, la experiencia kamikaze. Además, por si fuera poco, en tanto esta guerra del Cáucaso le está saliendo sumamente mal a Rusia, ha permitido que otras regiones ya no meramente islámicas, como por ejemplo la república de los Urales en la lejana Siberia, se insubordinaran también generando nuevas experiencias bélicas que ponen en peligro la misma integridad de la Federación Rusa. Esto ha hecho que el régimen resolviera poner en segunda plano su competencia con los EEUU y se encuadrara abiertamente con éste en la guerra en contra del fundamentalismo. Ello ha sido complementado con dos medidas excepcionales. La primera de ellas ha sido el retiro del apoyo a la República Islámica de Irán. La razón de ello es que, si bien tal régimen es en última instancia más nacionalista que fundamentalista, tiene sin embargo en su seno a sectores que reivindican a la figura del Ayatollah Khomeini y que están dispuestos a lanzarse a una guerra santa en contra de los EEUU al que siguen calificando como el gran Satán. Son estos sectores los que en estos momentos, a contramano de su actual gobernante, hoy apoyan abiertamente la acción en contra de Norteamérica sea en Irak como en Afganistán e incluso hablan de una alianza con las fuerzas de Al Qaeda dejando a un lado el conflicto ancestral entre chiítas y sunitas. Debido a este peligro evidente Rusia ha aceptado no enviar los misiles S-300 a Irán, a pesar de que éste ya los había pagado anticipadamente. Los mismos eran indispensables para la defensa de las instalaciones nucleares ante un probable ataque israelí. Esto por supuesto no le resultado sin embargo gratis al régimen ruso ya que desde Irán se le ha contestado que se liberarán prontamente a los miembros del Emirato del Cáucaso presos en sus cárceles.
Tal como vemos Rusia se ha comprometido de lleno ahora con EEUU y con Israel y esto es lo que explica también que haya resuelto participar de la próxima reunión de la Otan el 19 de noviembre en Lisboa. Allí con seguridad se planteará que ante la inminente salida de la guerra de Afganistán por parte de Italia y Francia entre otros (ya Holanda lo ha hecho), las fuerzas rusas tomarán la posta. Tal como vemos comunismo y capitalismo ya no son sólo metafísicamente iguales, sino que, gracias al fundamentalismo islámico, lo son también físicamente.
Para cerrar este tema queda todavía un pequeño espacio para dedicarle a toda esa prensa pretendidamente ‘alternativa’ de exaltadores de Rusia y de su líder ex KGB y multimillonario Putin que ahora se ha sacado la careta en forma definitiva. Durante años se han cansado de decirnos que Rusia era la gran alternativa ante Norteamérica y que Al Qaeda era un instrumento que éste utilizaba para desestabilizarlos. ¿Qué otra novela nos inventarán para explicarnos por qué se ha aliado justamente con aquel país para desbaratar a tal fuerza transnacional que según ellos era su instrumento? ¿Qué nos dirán ahora tales desinformadotes profesionales, aunque algunos los hay por vocación? Seguramente que nada pues apostarán a la mala memoria de las personas. Sabemos –y es hora de decirlo- que muchos de ellos reciben subvenciones pues Rusia se ha cansado de dárselas por décadas a sus agencias locales, los distintos partidos Comunistas, pero ahora que éstos son escasos en influencias ha acudido a otros frentes. No debe pues asombrarnos entonces encontrarnos a veces con publicaciones de dispendiosa presentación y que nadie compra resultando para algunos una incógnita de dónde reciban sus fondos; las mismas suelen escribir floripondios al tirano prosionista Putin y a las distintas tropelías que efectúa por el mundo.
Para terminar agreguemos que el nuevo frente de combate, tal como dijéramos en nuestra nota anterior, es el de Yemen cuya región sur se encuentra en manos de la organización Al Qaeda en la Península Arábiga. Es desde allí que se acaba de lanzar una ofensiva en contra de objetivos occidentales muy sensibles, como dos sinagogas en los EEUU. Más allá de que los mismos hayan tenido o no éxito, lo cual es en última instancia irrelevante, lo importante a señalar es que tales hechos, y no por nada el mismo presidente Obama ha tenido que señalarlo en un discurso, sirven para poner en evidencia una vez más el grado de profunda inseguridad en que vive el mundo moderno en nuestros días. Es en razón de tales hechos que habitualmente se silencian que esta Agencia se llama Kali-yuga.

Walter Preziosi
31/10/10