Carta abierta de Qari Mohammad Yousaf Ahmadi, vocero del Movimiento Talibán,a los miembros del Congreso estadounidense
07 de noviembre de 2010 09: 15-/ / / /
Carta abierta de Qari Mohammad Yousaf Ahmadi, portavoz del Emirato Islámico de Afganistán, a los miembros del Congreso estadounidense a los miembros del Congreso estadounidense:
Yo mismo aprovechando esta oportunidad, me complace compartir con ustedes mis puntos de vista sobre algunas cuestiones que se han convertido en una causa de preocupación para muchas personas amantes de la paz, no sólo en Estados Unidos, en Afganistán, sino para todas las personas en la región y el mundo. Ahora abiertamente se dice que el statu quo es insoportable y que deben ser tomadas medidas drásticas para cambiarlo.
Miembros del Congreso estadounidense, ustedes saben que el pasado 7 de junio del año en curso, la guerra de Afganistán, superó de Vietnam en términos de longevidad--convirtiéndose así en la guerra más larga en la historia de América. Irónicamente, esta guerra comenzó sobre la base de un evento que, en sí mismo, es un misterio para muchas personas. Pero su Gobierno está empeñado en continuar de cualquier manera con la misma. Y esto a pesar de que hemos dejado en claro desde el primer día que no tenemos ningún papel en este famoso evento del 11 de septiembre del 2001, ni tampoco hemos participado en operaciones en suelo extranjero en tanto que ello no es parte de nuestra política. También vale la pena mencionar que, ninguna entidad neutral que resulte aceptable para todas las partes, nunca ha llevado a cabo investigación sobre los acontecimientos de septiembre.
En resumen, la guerra comenzó recurriendo a la utilización de las armas más sofisticadas, letales y más recientes disponibles en su arsenal. Para hacer frente a esto, nuestro pueblo tuvo que resistir la ofensiva desplegando ante ella el más puro sentimiento de patriotismo para defender el país y la santidad de su fe religiosa. Desde el comienzo de la guerra, vuestro ejército, vuestros aliados de la coalición, los cortesanos regionales que los han acompañado hicieron la vista gorda a todas las normas universales y principios de la guerra, utilizando los procemientos mas inmorales y mezquinos en contra del pueblo afgano. Por lo tanto, Uds han establecido una nueva tendencia por la cual asesinar, capturar, acosar y insultar a los afganos se convirtieron en no solo en una cosa legal sino en una encomiable labor. Pueblos enteros de Afganistán fueron arrasados en su suelo como resultado de vuestro bombardeo pesado, utilizando para ello la excusa de que se trataba de terminar con los santuarios de los llamados terroristas. No sólo eso. Nuestras huertas fueron reducidas a cenizas; se cometieron asesinatos en masa en Afganistán septentrional y central, no una vez sino recurrentemente. Casas de los lugareños fueron destruidas, las mujeres violadas y el campo fértil quemado mediante el uso de bombas de uranio enriquecido. Cantidades de personas fueron puestas bajo detención en el famoso presidio de Jouzajan, en las cárceles de Guantánamo, Bagram y Kandahar durante muchos años por meras sospechas. ¡Todo ello fue hecho bajo el nombre de guerra contra el terror!
A lo largo de los últimos nueve años, los afganos han sido víctimas de la vorágine de una guerra impuesta. Han permanecido privados de la alegría y el consuelo de una vida normal. La aparición de asesinatos en masa, prisión, allanamientos de noche y constantemente saqueo de sus viviendas que se ha convertido en el orden del día para ellos. Cada mañana, el afgano se levanta de la cama, sin saber si él o ella verán la siguiente puesta de sol, pensando que podrían caer presa de un bombardeo ciego o aventurarse a padecer vuestras balas. Algunas veces, informes de medios de comunicación destacan estos eventos. Pero la imagen real y espantosa de estos acontecimientos terribles permanece almacenadas en los cofres de nuestro pueblo. A pesar de todas estas adversidades, nuestro pueblo permaneció firme, y perseveró en la resistencia. Y esto es lo que explica en última instancia las bajas padecidas por vuestras tropas y las pérdidas materiales que comenzaron a crecer en espiral a medida que fue pasando el tiempo. Naturalmente ha sido esto lo que los ha llevado ahora a discutir respecto de si se justifica o no tal guerra. Es por ello que hoy en día la guerra que están llevando a cabo en contra nuestro se ha convertido en uno de los temas más críticos pendientes para ustedes. En tanto supervisamos muy atentamente los acontecimientos, vemos que, después de cada jornada de fracaso de vuestras armas, aparece siempre un oficial militar que distorsiona la información sobre Afganistán. Es la manera como tratan de ocultar los propios fracasos. Al hacerlo, ellos quieren mostrarse victoriosos, para obtener beneficios financieros y echar más leña al fuego de la guerra. Vuestro Secretario de Defensa, Robert Gates, cada vez que toma la palabra en el podio, habla del avance militar en Afganistán. El General Petreous dice que la iniciativa de la guerra está en vuestras manos. Pero, de hecho, en los últimos dos años, sus distintas estrategias implementadas, incluyendo el aumento de tropas, construcción de nuevas bases militares, formación de milicias, impulso del ejército mercenario de Kabul etc.. fueron todas medidas que se han adoptado sin tener en cuenta las realidades de nuestra tierra. Es por ello que todos fracasaron. La resistencia de nuestro pueblo ha sido pues capaz de frustrar fácilmente todos los esfuerzos de vuestros distintos estrategas militares. El año pasado, sobre la base de la nueva estrategia de Obama, al sur de nuestro país aumentó en el despliegue de tropas, pero, por el contrario, hemos abierto nuevos frentes en el norte y este del país y hasta Uds tuvieron que reconocer nuestras operaciones allí. Se han iniciado operaciones para la captura de las zonas rurales, se infiltró en diferentes ciudades, incluyendo las ciudades de Kandahar y Kabul, ampliando nuestras operaciones allí. Así pues mientras por un lado se pretende revertir la resistencia nosotros ampliamos la Yihad para convertirla así en una resistencia de todo el país. Ahora tus tropas no son capaces de tomar un respiro de alivio en cualquier parte de Afganistán. Por último, se ha iniciado un operativo militar en la provincia de Helmand, considerándola como su iniciativa experimental para probar su fortuna. Pero sólo trajo como resultado un incremento notorio en vuestras bajas y fracasos. La resistencia ha aumentado comparativamente en áreas donde han llevado a cabo las operaciones. Tus tropas tienen las mayores pérdidas en vidas en estas áreas. En el este del país, las operaciones exitosas de muyahidines obligaron al general Mc Crystal a renunciar a la estrategia de protección de las zonas rurales al anunciar una nueva estrategia de concentración de fuerzas más entre la población de las zonas urbanas. A continuación, puso en marcha las operaciones de Marjah con gran fanfarria pero sólo resultó un fracaso con pérdidas cada vez mayores en soldados. Cada día que pasa se incrementa la letalidad entre sus filas. Del mismo modo, en este año actual, sus generales quisieron lanzar operaciones de Kandahar pero ha sido en cambio el muyahidín quien tomó la iniciativa en sus manos. La formación de milicias como parte de lograr el apoyo civil mediante el incremento del ejército de la administración Kabul fue su plan más prominente, propagado con gran fanfarria, antes de iniciarlo. Pero este plan también también les salió mal.
Vuestros generales y organización de inteligencia afirman que la resistencia actual en Afganistán es el resultado de la interferencia por parte de países vecinos. Sin embargo, al hacerlo, ellos quieren justificar la prolongación de la guerra. A veces, atribuyen la resistencia a los elementos extranjeros y de esta manera intentan soslayar que el movimiento de la Jihad es un movimiento popular del que participa la inmensa mayoría del pueblo afgano. De él participan hombres y mujeres, viejas y jóvenes de cada tribu, de cada etnia, de cada casta. Y eso es lo que explica que en su intención de eliminar la resistencia, han elegido el camino de cometer genocidio de toda la nación. ¿Cómo pueden pensar, que puedan ser unos simples militantes los que pueden enfrentarse a las fuerzas armadas de más de 40 países, incluidos entre ellos a los países más fuertes del mundo — y contando para ello con las armas más sofisticadas? ¿Una mera intervención clandestina y débil por parte de extranjeros puede ser capaz de hacer frente a todas estas tropas? ¿Pueden ser sólo los talibanes, es decir, los estudiantes de teología, los que puedan ser capaces de hacer frente a este gran número de fuerzas? Si Uds consideran que no es el pueblo afgano el que les está haciendo la guerra sino un grupo de extranjeros ayudados por otros países (cuáles?) les queremos hacer esta propuesta. Envíen una delegación neutral a que investigue quiénes son los que les están haciendo frente. Nosotros les aseguraremos impunidad, los dejaremos avanzar por todo el territorio que controlamos para que conversen con la población a fin de que esta les diga si está contenta con la presencia extranjera y si es cierto que los talibanes no somos combatientes afganos. Les aclaramos de paso que vuestro ejército solamente controla algunas ciudades y que el resto del territorio es decir el 80% está en nuestras manos por lo que les daremos franquicias de circulación. Queremos recordarles que vuestras tropas no pueden circular libremetne más allá de 2 km de las propias bases. Queremos al respecto darles el ejemplo de que cuando los muyahidín capturararon a vuestro soldado Bergh, viajaron con él más de 500 km a pie. Berg mismo atestigua que ningún soldado del Gobierno nunca lo detuvo en el camino durante ese largo viaje. Pero aún si no están dispuestos a aceptar nuestra propuesta, traten de preocuparse un poco por la situación de vuestro propio país y por los males que les ha ocasionado la guerra.
Uds deben erradicar de vuestra mente el temor de que Afganistán puede llegar a ser una amenaza para la paz en el mundo ya que se trata de una idea infundada de pura propaganda y una mentira fabricada por sus gobernantes para justificar y continuar su guerra ilegal, injustificada e irracional, la llamada guerra contra el terror. Habría que conocer mejor la realidad de que la guerra de Afganistán es una guerra perdida, nuestra nación tiene una historia de más de 5.000 años de edad; se trata de una nación que considera a la victoria y al martirio en la guerra contra vuestras fuerzas como un preciado don y que desea éxito no sólo en este mundo, sino también en el mundo por venir. Vuestra guerra militar moderna y avanzada se han topado contra una técnica imbatible como la expuesta por el muyahidín. Vuestros tanques, vuestra inteligencia militar vuestros equipadísimos soldados que os han costado tantos millones de dólares, son exterminados por simples afganos de a pie. Por ejemplo, Saleh Jan Aka de 69 años de edad junto con su hijo de 18 años, destruyeron 32 tanques de las coaliciones y 9 vehículos en Helmand, gastando en ello solamente $ 2500. Jan Aka, que nunca ha sido entrenado en la Academia militar de cualquier índole, ni dejó su trabajo de agricultura ni de su pueblo para hacer esto. Además, nunca ha pedido una especial recompensa para hacer esto. Calculen en cambio lo que ha costado cada uno de vuestros tanques por ejemplo.
Para finalizar quiero recordarles que, sobre la base del principio de vuestro lema universal (la democracia), la decisión adoptada por el Parlamento se considera definitiva porque es el Parlamento que aprueba los Fondos para cada misión. Yo me pregunto ¿vale la pena de que insistan tanto luego de tan estrepitosos fracasos? Uds como representantes del pueblo son una entidad autorizada para tomar la decisión sobre la cuestión del Afganistán, por lo tanto les he presentado con una verdadera imagen de la guerra de Afganistán--decir, la otra cara de la moneda, más diferente de la que es presentado a usted por sus generales.
Qari Mohmmad Yousaf Ahmadi
Spokesman of the Islamic Emirate of Afghanistan
lunes, 8 de noviembre de 2010
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