Respuesta del Emirato Islámico de Afganistán en reacción a afirmaciones del senador Lindsay Graham
Martes 04 de enero de 2011

El Senador republicano Lindsey Graham en una entrevista con la televisión de la NBC ha dicho que Estados Unidos deben mantener bases militares permanentes en Afganistán. Él ha afirmado que las bases serían beneficiosas para la región para la lucha contra los talibanes. Sus observaciones definitivamente levantan el telón respecto de los motivos colonialistas de América que el emirato islámico ha tratado en la última década de poner en evidencia ante la gente del mundo. De hecho, los invasores yanquis quieren establecer su dominio sobre la región y el mundo bajo la llamada guerra contra el terror. Por lo tanto, tratan de privar a los pueblos de sus derechos inalienables. En vista de ello, al Emirato Islámico de Afganistán le gustaría explicar su respuesta como sigue:
1. El Emirato Islámico de Afganistán rechaza categóricamente la propuesta hecha por el senador republicano. La intención de los Estados Unidos de mantener bases permanentes en Afganistán significaría extender la ocupación indefinidamente. Este paso ilegítimo nunca es aceptable para cualquier islamista y para el Afganistán patriótico. La población musulmana de Afganistán y los muyahidín del Emirato Islámico continuarán su lucha contra la ocupación y otras estratagemas de América hasta el momento en que Afganistán gane su merecido lugar entre los pueblos del mundo como un país independiente.
2. El mantenimiento de bases permanentes en Afganistán por parte de Norteamérica continuará creando problemas sociales, culturales y económicos para el Afganistán y la región. Privará a la población regional de su posibilidad de progreso económico. Las explosiones actuales en lugares congestionadas en las ciudades, las mezquitas, seminarios religiosos y manifestaciones son el resultado lamentable de la invasión de Estados Unidos. Por lo tanto, ni la gente de la región ni los afganos de amantes de la libertad nunca aceptarán las bases permanentes en Afganistán.
3. Observaciones efectuadas por figuras de alto rango de los mismos invasores yanquis nos han aclarado el hecho de que la guerra contra el terrorismo era una excusa falsa concebida y organizada por Washington. Su verdadero objetivo era ocupar Afganistán y mantener la dominación sobre la región. Los hechos relevantes surgen de uno a uno con el paso del tiempo. Los muyahidín del Emirato Islámico continuarán su lucha contra estas Conspiraciones hasta llegar a un final victorioso.
4. La invasión de América y sus aliados no tienen ninguna capacidad para hacer frente a los Mujahideen a la luz del día y esto queda en claro por la frustración constante durante el enfrentamiento de todas estas décadas en donde se han dedicado a asaltar casas en la quietud de la noche, matando a los afganos inocentes. Por lo tanto, en esta fase crítica, solicitamos a todos los países de la región y del mundo para conceder el debido reconocimiento a la lucha del pueblo de Afganistán contra el colonialismo y prestarnos la asistencia moral y financiera porque el actual movimiento de Yihad es, sin duda, a la lucha de liberación para amantes de la libertad de toda la humanidad a nivel regional y mundial.
5. El ritmo del progreso económico e industrial va a pasar de América y Europa a Asia en un futuro próximo. Este impulso económico necesita materias primas. Resulta claro que la invasión de Norteamérica quiere poner bajo su control los recursos naturales del Afganistán, aparentemente, bajo el nombre de guerra contra el terrorismo, por lo tanto con la intención de obligar a países de la región de acuerdo a los objetivos colonialistas de Norteamérica. Del mismo modo, quieren privar al pueblo afgano del acceso a sus recursos naturales y obligarlos a vivir en la pobreza y la miseria. Por lo tanto, el pueblo de Mujahid de Afganistán nunca permitirá que los invasores yanquis saqueen sus recursos naturales y le quiten su libertad.
6 Estamos dispuestos a entrar en transparentes acuerdos bilaterales con otros países sobre la base de los intereses nacionales y de la rentabilidad económica para la extracción de los aludidos recursos naturales.
7. El Emirato Islámico de Afganistán es una fuerza responsable. Aseguramos a todos los países regionales que mantendremos buenas relaciones con ellos a la luz de las normas nobles de la ética del Islam, después de la obtención de nuestra independencia. Mientras tanto, instamos a que no ser seducidos por Estados Unidos para dar su consentimiento para el establecimiento de bases permanentes norteamericanas en Afganistán bajo el nombre de guerra contra el terror injustificado. Los muyahidín del Emirato Islámico no se han convertido en débiles en su lucha legítima.
El Emirato Islámico de Afganistán.